Bruno Martínez, tras su rotundo triunfo en la novillada de Salas de los Infantes, acudía a su inmediato compromiso en La Alberca. Si el ajuste burgalés había sido el 15, el 16 era el salmantino. Y en este comparecía como protagonista único ante dos erales de Manuel Gimeno, encaste Juan Pedro.
Salió por delante un precioso jabonero (recuerdo de Veragua) con poco recorrido, en cambio obediente y franco a los toques. El navarro lo entendió bien y le estructuró una buena faena para dos orejas. Lo
pinchó, con lo que el premio quedó en una fuente ovación.
El segundo, un novillo muy fuerte, mucho más complicado; malo y a la defensiva; si no era un marrajo, se acercaba a “marraj”. Sin embargo, ahí estaba Bruno para solventar la papeleta. Le consintió, tragando
mucho, para sacarle muy buenas tandas por ambos pitones. Faena de mérito, ahora sí entró el acero, por lo que cortó trofeo con petición de otro. Lo paseó jaleado y entre ramos de flores.
Ficha:16-8-2024, La Alberca, Salamanca. Dos erales de Manuel Gimeno (Boadilla, Salamanca) de muy desigual comportamiento. Bruno Martínez, único espada, ovación y oreja.
Jesús Javier Corpas-Mauleón