24 de junio de 2023. Plaza de toros de TORREJÓN DE ARDOZ (MADRID). Casi lleno.
Andrés Romero oreja,dos orejas;Lea Vicens ovación, dos orejas; Guillermo Hermoso de Mendoza dos orejas, oreja. Toros de El Canario.
Torrejón de Ardoz, a las puertas de la capital madrileña, se está convirtiendo en una cita habitual en la temporadade Guillermo Hermoso de Mendoza y eso debe de ser porque sus actuaciones se cuentan por triunfos y sus actuaciones son del gusto de la afición.
Y viendo la actuación de Guillermo Hermoso de Mendoza en el primero de la tarde, lo cierto es que no nos extraña el cariño del público hacia él y la entrega del jinete para con ellos. A pesar que de inicio el toro parecía desinteresado en ALQUIMISTA y fue un tercio más de tanteo que de otra cosa, ya que el toro no le permitió reunirse en ninguna ocasión y los galopes para torearlo con la bandera y con la cola eran esporádicos. Algo vio el joven jinete, porque apostó por BERLIN y la moneda le salió de cara. El caballo comenzó a templarlo despacio, dejándolo llegar a los belfos de su cola y llevándolo a la velocidad que el toro marcaba para realizarle todo el repertorio BERLIN. Luciendo sobre todo con hermosinas muy templadas, muy suaves y ajustadas y sobre todo con mucha ligazón y siempre con la lidia justa, sin desengañar al astado. La lidia continuó ahora con la emoción de ECUADOR y dos quiebros espectaculares que pusieron la plaza en pie, atacando desde lejos y llegando a la misma cara del toro. La emoción estaba al máximo nivel y dos rosas con JUSTICIERO por los adentros prolongaron a un par a dos manos, también por los terrenos que el toro permitía. La faena era de altos vuelos y la gente estaba entregada, lo que demuestra que a pesar de los pinchazos, no cejase hasta que la presidencia le concedió al de Estella las dos orejas.
En el sexto también estuvo a punto de obtener otros dos trofeos y solo la tozudez de una presidencia manirrota hasta entonces, le privó de obtener un pleno orejil. Méritos los tuvo ante un toro que al revés que el primero, tuvo sus mejores momentos de salida cuando JIBARO se pudo explayar en torearlo en redondo, dejarlo que se rebosara por su grupa y marcando muy bien los tiempos en las reuniones. No estuvo Guillermo certero con los de castigo a pesar de las arriesgadas reuniones que ejecutó. En banderillas el toro se paró y fue BASAJAUN quien llevó el peso de la lidia, llegando a done el toro no quería salir y aprovechando las cortas y escasas embestidas que el astado realizaban, siempre sin abandonar su querencia de tablas. Nuevamente cerró la faena montando a JUSTICIERO dejando rosas y un par a dos manos y acertando al primer intento con el rejón de muerte. Los pañuelos afloraron mayoritariamente para todo el mundo, salvo para la presidencia que negó un segundo y merecido trofeo para Guillermo.
Jesús Javier Corpas-Mauleón