El novillero Enrique Portillo, gravemente herido por la coz de un caballo, ha recibido hoy la visita del matador de toros Rafael Rubio «Rafaelillo» en el hospital donde se encuentra.
La coz pudo desencadenar un desenlace grave debido a la hemorragia y la pérdida de conciencia. Todo el traumatismo se ha concentrado en la cara, afectando especialmente la boca, lengua, dientes, nariz y otras partes del rostro.
El mundo del toro, especialmente en Murcia y su comarca, sigue de cerca la evolución del novillero y empresario murciano. Según los médicos, se debe esperar a ver cómo evolucionan las heridas para luego intentar «arreglar» el daño en la cara de Portillo.
Rafaelillo ha intentado llevar una sonrisa a su buen amigo en estos momentos tan difíciles.
Rogelio Burnao