La Monumental Plaza México, en la Temporada de su LXXIX aniversario, fue escenario de la tercera corrida con tres cuartos de entrada. Y un clima agradable, tuvo como triunfador indiscutible, al diestro sudamericano, Andrés Roca Rey, quien esta tarde se consagró ante el público que lleno los tendidos del embudo de Insurgentes al cortar cuatro orejas y un rabo, este último el número 130 en la historia de esta plaza, luego de nueve años de no concederse, para ser paseado en hombros junto con el ganadero de Xajay Javier Sordo Madaleno Bringas y al final de esta apoteósica tarde, el torero Inca salió en hombros por la Puerta Grande de “ La Gran Señora de Insurgentes”
En esta apasionada tarde se lidio un encierro, de la dehesa de Xajay, propiedad de don Francisco Javier Sordo Madaleno Bringas, para el aguascalentense Joselito Adame, el limeño Andrés Roca Rey y el coahuilense Arturo Gilio, ante un casi lleno en el tendido de numerado con clima nublado y fresco.
Los toros fueron bautizados con nombres y apodos de monosabios de esta plaza.
Abrió el festejo Joselito Adame (obispo y azabache) con «El Negro», número 116, negro bragado meano, cornidelantero con 493 kilogramos, al que saludo con verónicas y realizo quites por chicuelinas. Se desmontaron en el tercio los banderilleros Fernando García y Fernando García junior, después de dejar tres buenos pares de rehiletes. Le brindó al cónclave capitalino, para muletear a un toro que se fue a la querencia y ahí lo muleteó a regañadientes, asesorado por el matador Eulalio Lopez «Zotoluco»; cortó por lo sano y lo pasaportó de una certera estocada para escuchar conventual silencio y pitos al toro en el arrastre.
Con el cuarto de nombre, «Don Simón», número 21, cárdeno claro bragado meano y veleto con 509 kilogramos el primer espada hidrocálido lo bregó llevándolo a la jurisdicción del varilarguero Daniel Morales. Brindó a la muerte del astado al ganadero don José Marrón, para iniciar su labor muleteril flexionando las rodillas, dos series de derechazos en los medios, naturales y gritos de “toro, toro” desde el tendido de sol, volvió a la diestra sin dejar quietos los pies y mal con la toledana: cuatro pinchazos y una estocada para ser pitado con un entreverado que le envió el Juez de Plaza don Gilberto Ruiz Torres y su Asesor don Juan Vázquez. Silencio al burel.
Andrés Roca Rey (tabaco y oro) con «Gamucita», primero de su lote herrado con el número 108, cárdeno claro bragado meano, cornivuelto con 416 kilogramos al que recibió con cadenciosas verónicas en el tercio, una chicuelina para rematar con una revolera. Lo llevó hacia la montura del de aúpa Sergio Molina que le pego puyazo en todo lo alto. Los subalternos Christian Sánchez y Ángel González se desmonteraron en el tercio después de cubrir espectacularmente el tercio de banderillas. Brindó a todos para hacer una faena con muletazos de gran calidad a un toro bravo y noble, finiquito su labor con la franela con derechazos, naturales, dosantinas y bernadinas coronado con una certera estocada
hasta los gavilanes para cortar dos orejas y arrastre lento al de Xajay.
El limeño con el quinto, «Jefe Arana», cárdeno claro bragado meano y cornidelantero con 514 kilogramos salió a por todas, larga cambiada de hinojos a porta gayola y otra más en tablas, mandiles rematados, finalizando su labor con el percal con una pinturera media. Buena vara recibió el quinto de la tarde de lo brazos de Alfredo Ruíz “El Miura”. El banderillero Antonio Chacón se desmonteró en el tercio.
Nuevamente brindó al cónclave capitalino, para iniciar el último tercio con temerarios estatuarios, un par de series de derechazos en los medios emocionando al respetable, un cambiado por la espalda y naturales en el mismo tenor, una dosantina, el pase del desdén y gritos de «torero, torero “que salían de las miles de gargantas que llenaron las localidades numeradas de la (Gran Plaza del mundo). Mato de una
eficaz estocada para cortar dos orejas y rabo que le entregó la alguacililla Ileana Hernández, arrastre lento al toro y vuelta al ruedo con el ganadero don Javier Sordo.
Gilio enfrentó en primer lugar a un toro manejable pero que decía poco. El diestro de la comarca lagunera estuvo voluntarioso, pero sin transmisión a los tendidos. Con el que cerro plaza de bonita pinta, pero sin bravura que pasaba con la cara alta, y aunque de salida le dio unas arriesgadas gaoneras que le fueron celebradas, luego no hubo manera de obligarlo a humillar y terminó muy deslucido, antes de que se diera a pinchar en una tarde para el olvido.
Andrés Roca Rey y don Francisco Javier Sordo salieron a hombros al final del festejo.
Ficha
Ciudad México. Tercer festejo de la Feria de Aniversario. Media entrada (unas 20 mil personas), en tarde agradable. Toros de Xajay, bien presentados, varios de hechuras armoniosas, de los que destacaron el 2o. por su bravura y 5o. por su calidad, premiados con arrastre lento. 1o. y 6o. fueron descastados; el 3o., manejable pero deslucido y el 4o., encastado y áspero. Pesos: 493, 496, 505, 509, 514 y 492 kilos. Joselito Adame (nazareno y azabache): Silencio y Pitos tras aviso. Andrés Roca Rey (tabaco y oro): Dos orejas y dos orejas y rabo. Arturo Gilio (espuma de mar y oro): Silencio en su lote. Incidencias: Sobresalieron en banderillas Fernando García hijo y padre, que saludaron una ovación en el 1o., así como Cristhian Sánchez y Ángel González en el 2o., que también fueron ovacionados en el tercio, como Antonio Chacón en el 5o. Y en varas, Sergio Molina y Alfredo Ruiz «El Miura», que colocaron magníficos puyazos al 2o. y al 5o., y fueron ovacionados. Destacó por su colocación Jorge Luna. Roca Rey y el ganadero de Xajay, Xavier Sordo, salieron a hombros. Al finalizar el paseíllo se rindió un homenaje a la Unión Mexicana de Monosabios, que dieron una vuelta al ruedo.
Texto e imágenes: Ricardo Adolfo Gómez Cardona /Ciudad de México 3 de febrero de 2025





















