El novillero César Pacheco ya se encuentra en su casa en México junto a su madre, ambos rebosando felicidad y, lo más importante, en buen estado de salud. Aún se nota la «cornada de espejo» en su cuello, una herida que estuvo a punto de costarle la vida, como comentó el doctor Robles camino del hospital de Caravaca de la Cruz, el más cercano en esos momentos críticos.
Afortunadamente, el novillero mexicano con picadores se encuentra en un estado excelente y con muchas ganas de volver a los ruedos cuanto antes para reanudar su carrera. Como bien saben los aficionados, la plaza de toros de Calasparra es un escenario donde se presentan los mejores novilleros con picadores del momento. Este año, César Pacheco destacó por su actuación en sus dos novillos, hasta que la gravísima cogida ocurrió al entrar a matar a su segundo astado.
Ahora, César Pacheco disfruta de la compañía de su familia, especialmente de su madre, mientras comienza a retomar poco a poco los entrenamientos para prepararse para su regreso a los ruedos.
Rogelio Burnao