El mundo taurino está de luto tras confirmarse el fallecimiento del joven forcado Manuel Maria Trindade, de tan solo 22 años, quien perdió la vida en la madrugada de este sábado a consecuencia de una lesión cerebral irreversible sufrida durante una corrida de rejones en la emblemática plaza de toros de Campo Pequeno, en Lisboa.
Trindade, miembro del Grupo de Forcados Amadores de São Manços, fue violentamente embestido por un toro de la ganadería Vinhas, de 695 kilos, durante el primer intento de la tradicional pega. El impacto contra las tablas lo dejó inconsciente en el ruedo, provocando una hemorragia severa y una parada cardiorrespiratoria.
Tras ser estabilizado en la enfermería de la plaza, fue trasladado con ventilación asistida al Hospital de São José, donde ingresó en coma inducido. A pesar de los esfuerzos médicos, las lesiones cerebrales resultaron irreversibles, y su fallecimiento fue declarado horas después.
La noticia ha generado una ola de conmoción en el ámbito taurino portugués. Trindade era considerado una promesa joven dentro del arte del toreo a cuerpo limpio, una tradición profundamente arraigada en Portugal. Asociaciones taurinas, compañeros y aficionados han expresado su pesar y homenajeado su valentía y entrega.