12 de octubre de 2024

Sanlúcar, facultad de rejones en una tarde soñada

Diego Ventura, máximo triunfador numérico de la tarde con cuatro orejas y un rabo. Le siguió Léa Vinces con tres orejas, y Rui Fenándes se llevó una del primero y recibió una gran ovación tras fallar con el acero ante el cuarto. “Puerta Grande” para Diego Ventura y Léa Vicens. 

Enorme tarde de rejones la vivida en el Coso de El Pino. Un festejo -a la postre- de muchísimo contenido y rejoneo del bueno ante una importante corrida de Pallarés y Benítez Cubero. La terna internacional se repartió un total de ocho orejas y un rabo, que saciaron los más exigentes paladares de la cabal afición sanluqueña. Rui Fernándes puso el clasicismo y debió salir a hombros con sus compañeros pero el rejón en el cuarto le jugó una mala pasada. Diego Ventura rayó la perfección -rejoneo Cum Laude- ante sus dos ejemplares -colaboradores pero en sus manos aún mejor- y tan solo un inoportuno pinchazo le privó de cortar otro rabo. Cerró la terna Léa Vicens con suprema elegancia y temple en toda la tarde, además de imprimir tremenda raza al difícil sexto.

“Filibustero”, de Pallares, un berrendo en negro que sacó muchos pies por lo que Fernandes dejó dos rejones de castigo. Lo fijó a la grupa con exposición y temple en un inicio vibrante. Montó de salida a Bala y posteriormente en banderillas a El Dorado y Mistral en un tercio de sentido clásico y siempre buscando la reunión de frente. Con Mistral imprimió vistosidad con piruetas en la cara del toro y con un par a escasos metros de enorme exposición. Iceberg para cortas en carrusel -dentro del tercio- con ritmo y arriba. Un inoportuno pinchazo antes del rejón le restó en el premio. Oreja con petición de segunda. Todo ante un buen ejemplar y con un rejoneador en plena madurez.

“Lamero”, de Benítez Cubero primero de Diego Ventura. El genio de La Puebla del Río montó de salida a Guadalquivir con el que fijó con enorme exigencia a la grupa en un recibo en carrusel. Fabuloso hizo las delicias del centenario Coso del Pino -de frente, por derecho, quiebros- todo con supremo magisterio. Banderillas a una mano supremas atravesando el ruedo desde tablas para reunirse en los medios. Antes tan sólo un rejón que lo dejó crudito. Nivaldo levanto al público con un rejoneador metido en su enorme obra y toreando a placer a buen toro -esperó en los medios en corto- a que se le llegara mucho.  Un tercio con pares a una mano muy de verdad y quebrando encima del hocico para salir toreando con estatus. Firmó un par inverosímil por terrenos y belleza. Diego templo y metió a su toro debajo del estribo protagonizando un rejoneo categórico y estratosférico. Para finalizar Divino con el que realizó un carrusel impresionante -como toda la faena- dejando los palos en una ‘perra gorda’  y arriba del morrillo. El par a dos manos de auténtico museo. Rejonazo y patas arriba, dos orejas y rabo tras una faena que rayó la perfección. Brindó Diego Ventura su labor a Bertín Osborne.

“Humanoso” de Pallares, para abrir el lote de Léa Vicens. Toreó de salida con Cleopatra y clavó dos rejones de castigo muy bien ubicados. Temple y elegancia en un tercio de poder. Después Diluvio con un toreo distinguido y brillante -recorrió el anillo por dentro del tercio- galopando a dos pistas y encontrando toro en los medios. Le dio querencias al toro y templó exquisito ante un toro -otro bueno- pero poco humillador que tiraba un derrote arriba. Precioso pasaje con una Lea muy encajada y crecida que rejoneó con pasión. Banderillas a una mano en todo lo alto. Bético continuó un gran tercio de banderillas. Greco  para cortas volcándose en el lomo del astado. Otro ejemplar y van tres que colaboraron. Espontáneo concluyó una extraordinaria obra que tras rejonazo valió dos orejas y la abrían la puerta grande para una sensacional Léa Vicens. 

“Naviero”, de Pallares. Olimpo recibió a un cuarto con muchos pies. Apretó de salida el segundo del lote -vestido a la Federica– al que dejó un rejón. Se quedó fuertecito y aquello tuvo transmisión. H Quiebro se alzó de manos, piruetas y buscó la reunión en el centro. El portugués encontró toro en todos los terrenos y toreó en todos espacios de la plaza. Rui pasajeó con instrucción y temple ayudando a su oponente que en banderillas quiso abrigarse en el tercio. El Dorado mostró poder y elasticidad en los mandos de un rejoneador clásico y sobrio. Para epilogar sacó a Pampillo dos cortas, una ferpa y dos rejones muy atrás –más algún pinchazo- empañaron una labor que mereció mucho más que la tremenda ovación que recibió. Se le vio apenado a Fernándes por el atasco con el rejón pero Sanlúcar le reconoció con una atronadora ovación.

“Jazminito”, de Pallarés, un tío en toda regla. A este Ventura lo recibió con Campina con la que dejó un rejón. Lío hizo honor a su nombre y lo formó en banderillas a una mano al galope y quebrando a escasos metros. Tremendo caballo y rejoneador. Nómada puso el toreo de alta escuela con piaffes elegantes y reuniones arribas. Siguió con Bronce pares -a una mano- monumentales. Otro sin cabezal que hizo crujir a la plaza. Todo ante un bravo antagonista que se emplazó en los medios y espero a que le provocaran. Tuvo cambios de ritmo el de Pallares pero sucumbió al poder de Diego Ventura. La magistral obra la epilogó con Guadiana en un carrusel de cortas impresiones y una de final -al violín- cumbre. Un pinchazo restó otro más que posible rabo. Dos orejas.

“Vitigudino”, de Benítez Cubero, al que recibió Léa Vicens a lomos de Guitarra un toro que salió distraído y sin fijeza que manifestó quererse rajar varias veces. Un rejón de castigo y rompe el astado pegando arreones. Otro más para bajarle los humos con una Léa enfibrada. Aladín para banderillas a una mano -tuvo exponer mucho- ante uno que no quería ir que se abrigo en el tercio. La rejoneadora tiró de experiencia y gran oficio para poder construir un tercio de mucho lujo. Elegancia y torería a pesar de no ayudarle el toro. Bético se metió por dentro en un par de riesgo supremo y se llevó un enorme susto al descabalgarla el toro tras un arreón. Se sobrepuso con raza y firmó un tremendo par. Fermín para las rosas en carrusel y algunas al violín. Espontáneo cerró una preciosa faena ante un complicado y difícil  sexto. Rejón arriba y oreja para una importante Léa Vicens.

FICHA DEL FESTEJO

Sábado 6 de abril de 2024

Plaza de Toros de Sanlúcar de Barrameda – Coso del Pino

“Corrida del Arte del Rejoneo” 

Toros de Pallarés (1º, 3º, 4º y 5º) y Benítez Cubero (2º y 6º). Todos de impecable presentación y extraordinario juego salvo el complicado sexto.  

RUI FERNÁNDES: Oreja con petición de segunda, y Gran ovación.

DIEGO VENTURA: Dos orejas y rabo, y Dos orejas.

LÉA VICENS: Dos orejas, y Una oreja. 

Observaciones: Sonó el himno nacional antes de iniciarse el paseíllo.

Fotos: Eva Morales

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