Torres de la Alameda acoge este sábado la última clasificatoria del Circuito de Madrid. Jesús Moreno y Adrián Centenera ante los novillos de La Machamona y Victoriano del Río
Abrirá la tarde Jesús Moreno “consciente de la importancia y la repercusión que puede darme dicha tarde”. Conoce las dos ganaderías, “unos hierros que como se ha podido comprobar son de garantías y tengo plena confianza en que será un festejo en el que disfrutemos todos”. A los aficionados les manda un mensaje claro: “soy un novillero que se entrega, que busca torear despacio y que en la plaza no va a defraudar”.
Adrián Centenera cerrará las clasificatorias del certamen. Conoce ambas ganaderías y destaca “la transmisión que ofrece el encaste Santa Coloma (referido a la Machamona) y de Victoriano del Río esa movilidad y la codicia que hemos visto en otros animales de esta casa”. Acartelarse en mano a mano “supone una responsabilidad mayor, el enfrentamiento directo obliga a no dejarte nada en el hotel”. El mensaje a los aficionados es claro: “soy un torero que se basa en la entrega y que disfruta con todo lo que hace”.
La ganadería Victoriano del Río llega el sábado con dos novillos “abiertos de sementales, que han funcionado muy bien sin caballos y consideramos que ya estamos preparados para el cambio de escalafón”, afirma Pablo del Río, su ganadero. En esta casa ganadera buscan la distinción, criando animales “cuya seña de identidad es la transmisión” y permiten “a cada torero expresar su concepto”.
Por su parte, José Manuel Quintas, de la ganadería, lleva “unos novillos bajos, en el tipo Santa Coloma y con cara”. Lidiar en duelo es atractivo para el ganadero, “y más cuando son dos encastes diferentes, que permiten medir a la ganadería y al aficionado ver la capacidad de los novilleros con cada novillo”. El mensaje a los novilleros es claro: “hay que hacerle bien las cosas al novillo en los primeros tercios y aprovechar cada embestida porque son animales agradecidos”.